Una sombría y fría tarde de Enero, Pablo, un niño alto y esbelto de carácter débil, se dispuso a salir. Caminaba entre los árboles de aquel bosque solitario. A lo lejos divisaba varios transeúntes con la mirada perdida. Se adentró entre los arbustos, y justo allí, descubrió algo nunca visto, era algo extraordinario, inexplicable. Allí podía ver los planetas tan cerca como si estuvieran a su lado. Pudo analizar como los planetas seguían una órbita fija. Pero........vio algo mucho más raro, era una especie de máquina voladora, se aproximó ella. Esta tenía una forma muy extravagante y poseía muchos colores. De su interior, salía una melodía relajante y optimista. Pablo no se atrevía a entrar, ya que no sabía muy bien que era aquello, pero después de mucho pensar, se dijo a sí mismo:
-¡Yo soy intrépido y puedo hacerlo!
Así que se armó de valor y entró en las entrañas de de aquel aparato. Pablo exploró todo aquello, y se dio cuenta que se podía tratar de un ovni.
De una de las salas, surgió un aroma muy agradable, y segundos después, se asomó un ser muy extraño. Este ser era de piel rosa, y poseía solamente un ojo, a su lado se encontraba un tatuaje con forma de corazón. Sus pelos estaban revueltos y enredados. Contenía cuatro brazos, y su vestido era rojo con diminutas rayas de colores. A su lado se encontraba un ser pequeño, con forma de corazón, tenía dos antenas. El primero de estos dijo:
-Hola, soy Pitiflu, y tu has sido el eligido.
Pablo, estupefacto, contestó tartamudeando:
-¿El elegido para qué?
-Tranquilízate, te lo explicaré todo. Tu has sido el único valiente se ha atrevido a hacerlo. Todos hacían el intento con mucha sobriedad, pero siempre en vano, ya que estos no tenía suficiente valentía, por eso se iban.
Pablo replicó:
-Pero ¿y que tengo yo que ver? ¿para que soy el elegido? ¿qué es todo esto? ¡yo no entiedo nada!
-Siéntate. Nuestro mundo corre un grave peligro, unos alienígenas, nos quieren invadir, y necesitamos un humano, un humano capaz de dibujar, ya que nosotros no tenemos dedos para dibujar. Realizaremos un concurso, y el que gane se quedará con nuestro planeta. Ayúdanos por favor.
-Esta bien, lo haré.
Pitiflu, Pablo y la mascota despegaron, en ese instante se escuchó una detonación estridente. En unos segundos llegaron a su planeta. Pablo realizón el dibujo y finalmente ganaron el concurso. Los habitantes del planeta se lo agradecieron mucho y Pablo se llevó ese viaje como una experiencia inolvidable.
PUUUM, se escuchó, Pablo se despertó sobresaltado y se dio cuenta que todo había sido un sueño, un increíble sueño, o quizás algo más.....??
4 comentarios:
!ME HA ENCANTADO TU CUENTO¡ lA HISTORIA HA ESTADO MUY BIEN REDACTADA CON LAS PALABRAS CULTA .y HAS TENIDO UNA CAPACIDAD DE IMAGINACION INCREIBLE ME HAS DEJADO CON GRAN ESTRUPOR
¡Guau!¡No puedo decir nada! Bueno, una cosa sí...¡María tiene toda la razón! Me has dejado estupefacta con tu estupendo cuento.
Tienes mucha imaginación, aprovéchala.
Podrías haber hecho una patata, como he hecho yo(lo digo además porque el cuento va sobre una patata), pero sin embargo has sabido poner justamente lo que a mí me gusta.
Lo que más me ha gustado es como se ha quedado Pablo cuando Pitiflu de ha dicho lo de que era el elegido.
Él es un personaje valiente, ya que, en lugar de escapar, ha pedido una explicación sin excusas, y Pitiflu es muy amable, porque ha sabido calmar a Pablo justo en el momento adecuado. Me ha encantado tu cuento.
Ha decir verdad tu historia es muy graciosa, y me ha dejado sin una sola palabra, me gusta mucho el toque de intriga qué incluyes al final solo una cosa más surte y espero que dejes atónito a más de uno.
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